En las alocuciones de los candidatos presidenciales a la Casa Blanca no ha faltado la opinión sobre Venezuela: La demócrata Hillary Clinton asegura que Estados Unidos acompaña a los venezolanos que expresan “su derecho constitucional de emprender un cambio de rumbo”. Mientras el republicano Donald Trump considera que el país ha sido llevado a la ruina por los socialistas. “Yo defenderé a los venezolanos que desean ser libres”, promete.
No sin razón los venezolanos ayudarán a definir el camino a la Casa Blanca. En Florida, entre las 10 comunidades extranjeras de mayor peso poblacional y electoral, se encuentran los venezolanos. De acuerdo con el Centro de Estudios Latinoamericanos, Caribeños y Latinos de la Universidad de Nueva York, 61.707 venezolanos formaban parte del electorado latino hasta 2014.
Florida es uno de los 5 estados críticos para los partidos Demócrata y Republicano, al tener 29 votos electorales, por detrás de California (55) y Texas (38). Están habilitados para votar 14.157.000 ciudadanos, de los cuales 2.557.000 son latinos, según datos de la encuestadora Pew Research Center. Su directiva señala que no tienen estadísticas de los hispanos por nacionalidad habilitados para estos comicios. Asegura que la información podría generarse después del 8 de noviembre cuando será elegido el próximo presidente.
La intensa migración venezolana de los últimos años también ha aportado votantes. Durante el año fiscal 2014 el Departamento de Seguridad Nacional reconoció que fueron otorgadas 6.871 ciudadanías por naturalización a venezolanos, todos mayores de 18 años de edad. En 2013 contaron 7.648 y 7.404 en 2012. Adquirieron el derecho y la responsabilidad de participar en las elecciones federales luego de prestar Juramento de Fidelidad en una ceremonia administrativa.
En Florida, después de Cuba, Haití y Colombia, los venezolanos se han mantenido en los primeros lugares con más concesión de nacionalidades estadounidenses.
Venezolanos decidieron. Algunos connacionales residentes en Florida ya tienen clara su intención de voto. “De Trump me desagrada todo, incluida la gorra rojita”, dice Angélica Tang, que vive desde hace 36 años en el condado de Broward. Tang tiene 69 años de edad y ya no trabaja. Por varios años se dedicó a cuidar ancianos.
Todavía no ha emitido su voto y, aunque reconoce los errores de Clinton, opina que la demócrata tiene carrera política, clase y educación, a diferencia de su oponente. “Si Trump no le cierra la entrada al inmigrante, por lo menos le haría el trámite bien amargo”. Tang le ha dicho a sus amistades estadounidenses que no voten por el candidato republicano. “Él tiene las características y el perfil de los dictadores por todos conocidos: Castro, Chávez, Maduro. Aquí hay mucha confusión. Los jóvenes piensan en la famosa palabra ‘cambio”.
Marianela Guastella vive en Miami desde hace 15 años y da clases en una escuela primaria. También relaciona la ideología de Trump con la de Chávez. El magnate “luce como un comunista”, afirma.
La internacionalista Angelina Jaffé refiere que los venezolanos ya tienen una conciencia política por lo que ocurre en Venezuela. “Muchos están convenciendo a los estadounidenses de no votar por Trump. Esa motivación proviene del lenguaje populista que él utiliza”.
Kenneth Ramírez, profesor de la UCV, agrega que ante la diáspora el mensaje de los políticos estadounidenses hacia los venezolanos ha tomado importancia: “Es de suponer que el respaldo sea para Clinton. Los venezolanos han escuchado lo que querían oír. Por ejemplo, el anuncio de Clinton de generar mayor presión sobre Venezuela”.
¿Cómo es el voto latino?
Cifras del Pew Research Center muestran que 27,3 millones de hispanos están inscritos para sufragar en las presidenciales. Florida, Arizona, Colorado y Nevada son los estados con más presencia de latinos.
Proyecciones de National Directory of Latino Elected Officials indican que sufragarán por lo menos 13,1 millones de personas. El Centro de Estudios Latinoamericanos, Caribeños y Latinos también proyecta que 64% de los latinos asistirá a las urnas en noviembre. El promedio de participación de esta comunidad es de 48% desde 1992.
Otros datos apuntan que 4 de cada 10 hispanos son demócratas, lo que representa 38% de esa población; 37% no están afiliados a los principales partidos y 25% son republicanos.
DC | EN