Hace varias semanas se expandió el rumor de que el TSJ produciría una sentencia liquidando el Referendo Revocatorio, este corillo aunado a las maniobras dilatorias del CNE busca crear desaliento, desesperanza e incertidumbre en el país. El fusilamiento del TSJ al Revocatorio terminó en un plomazo de “chopo viejo” por parte de la Sala Electoral, con el argumento inconstitucional de establecer el 20% por entidad federal, cuando la circunscripción del Presidente es nacional como lo establece la Carta Magna. El formato del PSUV es tan pirata y carente de valor republicano que ya comienzan a sentirse las voces de exministros como: Gustavo Márquez, Héctor Navarro, Ana Elisa Osorio, Maripili Hernández; el General Cliver Alcalá y el diputado Eustoquio Contreras cuestionando la empobrecida parodia.
El revocatorio del 2004 se hizo bajo el criterio constitucional del 20% sin tantas trabas; por cuanto había disposición de contarse. Ahora están llenos de miedo a cualquier elección, la paliza en las parlamentarias los tiene traumatizados y huyendo hacia adelante, cometiendo arbitrariedades, en síntesis hablarle a Maduro de revocatorio es mencionar la soga en casa del ahorcado.
La sentencia de la Sala Electoral la van a sepultar 6 millones de venezolanos que acudirán los días 26, 27 y 28 de octubre a validar la solicitud, con lo cual el Presidente y su entorno tendrán que hacer maletas con destino prolongado hacia La Habana o Rusia.
Hay mucha indignación en toda la nación, la respuesta a la espuria Sala Electoral es: “más rápido voy”, “estos tipos no se van a burlar de Venezuela”. Los ciudadanos están convirtiendo en punto de honor derrotar el miedo y abrir la senda de la esperanza a un país de progreso, bienestar y felicidad. Estamos obligados a alertar sobre lo que viene, el mandado no está hecho hasta concluir exitosamente la jornada, derrotando las alcabalas de malhechores y violentos. La usurpación constitucional de esta indigencia democrática que pretende imponernos la “Oligarquía Roja” será derrotada por la avalancha popular, con una señal clara para el mundo de la valentía criolla.
El Gobierno quedó derrotado en su intriga por dividir la MUD, para cerrarle el paso al clamor nacional. El oficialismo es hoy una fiera herida, sin la fuerza popular de antes, con un cogollo raspando la olla para huir cuando se las termine el cuarto de hora; acarician la posibilidad de sabotear con violencia los centros electorales. Frente a semejante locura, las Fuerzas Armadas son responsables de la seguridad del proceso, la preservación de la paz y el desarrollo normal de la jornada. El Ministro Padrino López y sus efectivos no pueden permitir anarquía, zozobra y violencia, o responderán ante la historia, los tribunales internacionales penales y los nacionales en su momento oportuno.
El Referendo Revocatorio es un derecho político de la nación para evaluar a sus gobernantes; si me empujas con una sentencia delictiva: mas rápido voy a defender mi dignidad.
DC / José Luis Pirela / Diputado AN por San Francisco– Zulia / Notas Progresistas / @joseluispirelar