Un hombre fue detenido en la localidad de Fabero, en Bierzo, una comarca situada al oeste de la provincia de León (España), por haber secuestrado a su expareja y ponerle pegamento en la vagina.El lunes pasado, la mujer de 36 años, cuyo nombre no ha sido revelado, estaba a punto de salir de su casa cuando de repente sintió que alguien se le vino encima; en ese momento reconoció a su expareja y a un chico alto.
La víctima fue llevada a la bodega de la casa de la madre de su expareja, donde la golpearon y le pusieron un pegamento por la parte vaginal.
Después de varias horas de maltrato, la mujer fue abandonada al lado de una casa en ruinas semidesnuda y maniatada.
Al encontrarse sola, la mujer mpezó a correr sin rumbo hasta que llegó a una farmacia donde la atendieron y fue trasladada en una ambulancia al hospital.
Según el médico que la atendió, la víctima llegó con claros síntomas de ansiedad y presenta hematomas, quemaduras de primer grado en el muslo izquierdo, lesiones en las muñecas, en los tobillos y en el pubis donde hay restos de pegamentos.
La víctima denunció a su expareja en el cuartel de la Guardia Civil y este fue detenido.
El acusado, que está en disposición judicial el día de hoy, ha estado implicado en múltiples detenciones y entradas en prisión por no obedecer a la orden de alejamiento.
DC|Telemundo