Divisiones y Felonías en la MUD, por Douglas Zabala (@douglazabala)

 

Serán de AD o del Nuevo Tiempo, puede que sean de Voluntad o de repente de Vente.  Quizás los primeros hayan sido de Primero Justicia o Gente Emergente. También los felones pudiesen ser los mayameros masca vidrio y traga vinagre de Orlandito Urdaneta y Alberto Franceschi.  El muy ponderado negro Fermín y el tigre echao de Eduardo Fernández, huelen a patriotas cooperantes. Hasta los Judas del siglo XXI pudieran estar en los archipiélagos de Copey.  Bajo sospecha está el MAS de mis tormentos, quien, junto al Frijolito, desde hace rato y de forma extraña, le dieron un beso de despedida a la hoy afligida, confundida y divida MUD.

 

El asunto es que el ahora ultroso Capriles, anunció que en la MUD hay gente que dice estar con el cambio, pero reciben dinero de boli burgueses a cambio de pasarle información al gobierno. Y la duda no termina de aclarase cuando de repente en plena fortaleza opositora, surgen de nuevo acusaciones sobre deslealtades, canalladas y hasta conductas infames, por parte de diputados que debieron estar a la hora de levantar la mano, y por sus “culpas” la unidad, amenaza con irse a pique en estas aguas procelosas de dimes y diretes divisionistas.

 

Con o sin razón, desde Voluntad Popular, su Jefe de Bancada ha pedido la expulsión del partido Un Nuevo Tiempo, por faltar al compromiso unitario. En fin, la MUD con estas dos recientes afirmaciones sobre la honorabilidad de sus integrantes, está poniendo de relieve que, en esa gran alianza política, más que traiciones, lo que existe es una fuerte contradicción acerca de cuál debe ser la estrategia a seguir, una vez que el gobierno, les arrebatara la única posibilidad de salir de Maduro antes del 2018, por la vía electoral. Y ese es el punto a debatir.

 

Para nadie es un secreto que allí hay quienes exigen a rabiar el fin del régimen ya, y quienes, armados de paciencia, están planteando que este proceso se ha tornado lento, pacífico, democratico y al ritmo de cómo la gente vaya pautando su participación. Sobre todo, porque las veces que aquí se ha tomado el atajo inmediatista y radical, el único favorecido ha sido el sector oficialista.  De esto pueden dar fe el 11 de abril, el paro petrolero, la abstención electoral y la reciente salida impulsada por el hombre fuerte de Ramo Verde.

 

La reciente disputa interna en la alianza opositora, a raíz de la bochornosa Sesión de Cámara, donde no pudieron nombrar los Rectores del CNE, prendió las alarmas. Y no tanto por la inasistencia de los diputados, sino porque horas antes, habían roto un acuerdo previo con el gobierno, y se fracturó debido a que los factores en pugna no pudieron escoger por consenso el candidato a Rector, que representaría a la MUD.  Y como guinda de la torta, tampoco fueron capaces de acordarse para designarlos, una vez que el TSJ ratificara las Rectoras.

 

Así las cosas, habrá que preguntarse de qué lado estarán los dirigentes en la MUD; porque mientras allá se caen a dentelladas, el pueblo humilde y sin inmunidad parlamentaria, hastiado de las loqueras de Nicolás Maduro, ha resuelto salir a la calle, a buscar las soluciones que esta dirigencia política no ha sido capaz de aportar, entre otras cosas, por andar entretenida en sus divisiones y felonías.

 

DC / Douglas Zabala / @douglazabala

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