Entusiastas británicos de los viajes espaciales enviaron este jueves a la estratosfera una tarta rellena de carne y patata con el objetivo de cocinarla con las altas temperaturas que alcanzará en su reentrada a la Tierra.
El pastel fue lanzado a bordo de un globo aerostático en torno a las 11.30 GMT -según informó la BBC– desde la ciudad inglesa de Wigan, donde a partir del martes se celebra el denominado Campeonato Mundial de Consumir Pasteles.
Miembros del grupo inglés SentIntoSpace instalaron una cámara y un equipo de localización al aparato meteorológico para poder seguir el periplo del pastel.
Los responsables del experimento creen que la tarta se congelará durante el trayecto hacia los 30 kilómetros altura, pero se cocinará gracias a la “enorme velocidad” que adquirirá en el descenso.
“Este es el primer paso para que la Humanidad pueda consumir pasteles con mayor elegancia y confort”, dijo Bill Kenyon, uno de los artífices del proyecto.
Tony Callaghan, propietario del bar donde se celebrará la competición de comer pasteles la próxima semana, se mostró orgulloso de la voluntad de los concursantes por “ir allí donde la Humanidad no había estado nunca”.
El hostelero confió en que este año se pueda batir el récord de 16 segundos al consumir un pastel “reglamentario”, de un diámetro de 12 centímetros y una profundidad de 3,5 centímetros.
“Sabemos que los científicos han estado experimentando con vegetales en la Estación Espacial Internacional para comprobar si cambia su estructura molecular”, dijo al diario Manchester Evening News.
“Nosotros experimentamos con pasteles, para ver si su estructura cambia al viajar por el espacio y así pueden ser consumidos más rápido”, agregó.
DC | EFE