Todo comenzó cuando una persona, que fue descrita como «alterada», llamó el viernes a la policía del estado de Nueva York para informar que «una mujer había muerto congelada» en un auto estacionado en la ciudad de Hudson.
Según los medios locales, cuando los oficiales acudieron al lugar encontraron a «una persona inmóvil» que tenía el cinturón de seguridad puesto en el asiento del pasajero.
La «mujer» tenía una mascarilla de oxígeno en la cara.
El auto estaba cubierto de nieve lo que sugería que había estado en el exterior durante la noche bajo temperaturas de unos -13ºC.
Pero cuando la policía entró al vehículo para rescatar a la mujer, descubrió que se trataba de un maniquí.
Realista
Los oficilaes indicaron que era un maniquí «extremadamente realista». Llevaba ropa, lentes y zapatos reales, y teníua dientes y manchas en la piel.
Posteriormente el dueño del objeto dijo que éste formaba parte de un su equipo de entrenamiento de primeros auxilios médicos.
Los oficiales rastrearon al dueño, que se quejó de las acciones de la policía, que rompió el vidrio del auto.
«Entiendo que el dueño no podía creer que habíamos tomado medidas en este asunto», dijo en una declaración el jefe de la policía de Hudson, L. Edward Moore.
«Aparentemente le habló de forma muy fuerte y vulgar a mi sargento».
El jefe Moore dijo que tenía un mensaje para los dueños de maniquíes.
«Sólo para aclarar las cosas, todos los ciudadanos de Hudson serán notificados de que si estacionan su vehículos cerrados en la calle en temperaturas de menos cero grados con un maniquí de tamaño real sentado dentro de éste, romperemos sus vidrios».
DC|BBC