Un disparo en le pecho le segó la vida al pequeño Anthony Gil Fontalvo, de 3 años, la tarde de este jueves en el sector San José del barrio José Félix Ribas de Petare, específicamente en la Zona 10.
El niño caminaba con su madre, su abuela y su hermanito de 4 años por las escaleras del barrio, cuando unos delincuentes pasaron corriendo y enfrentándose a tiros.
La mujer quedó atrapada en la balacera y el niño fue alcanzado por el proyectil, mientras que la abuela protegió al otro infante y corrió a resguardarse.
De los pistoleros no se supo nada, pues huyeron de inmediato.
La madre del niño lo cargó y pidió auxilio a gritos, pues estaba grave.
Su cuñado que estaba cerca agarró al niño y se lo llevó en una moto hasta el hospital Pérez de León, donde ingresó muerto.
«No hubo forma de salvarlo porque la herida era muy grave. En el hospital todo el mundo lloró por esa tragedia. Mi hermana está destrozada. No es fácil atravesar esa situación», relató Kenia Molinares, tía del niño.
Dijo que su hermana iba a una barbería de la zona a cortarle el cabello a sus dos hijos, pues el mayor cumplía 5 años este viernes.
«Ellos estaban muy emocionados porque iban a comer torta, por eso mi hermana los llevó a afeitar. Nunca se metía por esas escaleras, pero esta vez lo hizo por primera vez y mira lo que pasó. Una desgracia. Estas navidades ya no existen para nosotros», relató la mujer afligida.
Ante la tragedia, la familia no sabe a quién culpar por la muerte.
«No tenemos a quién culpar ni a quién pedirle justicia, esto es el día a día», dijo.
DC|EU