Grupos de manifestantes intentan bloquear en tono festivo y desde primeras horas de la mañana los accesos a los puntos donde el público puede contemplar la investidura presidencial de Donald Trump y el posterior desfile.
Con bailes, banderas arcoiris y carteles de «No a Trump», decenas de manifestantes se concentraban en las entradas del público a los diversos puntos de la Avenida Pensilvania o la explanada del National Mall donde se puede contemplar la investidura.
No obstante, algunos grupos de jóvenes anarquistas eligieron realizar cadenas humanas para bloquear las entradas al evento de toma de posesión del presidente electo Trump, aunque no se ha informado de altercados graves.
Una fuerte presencia policial de agentes del Departamento de Seguridad Nacional y otros cuerpos observaba hoy de cerca el transcurrir pacífico de estas acciones coordinadas por el colectivo DisruptJ20, que reconoce que no tiene autorización para este tipo de manifestaciones.
DisruptJ20 espera que hoy se den detenciones de sus manifestantes, que anoche ya se tornaron violentos en algunos casos, en contra de simpatizantes de Trump.
Pese a estas protestas, los simpatizantes de Trump están accediendo al perímetro de seguridad, donde esperan poder ver el paso del nuevo presidente y primera dama, Melania Trump, o asistir a su discurso inaugural desde las escalinatas del Capitolio.
Se espera que decenas de miles de manifestantes marchen hoy desde varios puntos de la ciudad para confluir en una plaza cerca de la Casa Blanca, mientras que otra organización quiere concentrar opositores a Trump en un espacio frente a la Avenida Pensilvania, por donde desfilará a pocos metros el nuevo presidente esta tarde.
Una portavoz del grupo Answer Coalition informó hoy que espera un gran grupo de manifestantes en la plaza del Navy Memorial, anexa a la avenida por la que transcurrirá el desfile y donde podrán expresar su descontento frente al presidente.
DC|El Nacional