Su esposo y la amante le decían vaca y ella les contestó con un cambio radical.

«Después de que tuve a mi hija estaba más gorda que nunca (…) y sufría de depresión posparto y ansiedad”, confesó al Daily Mail.

Pero eso no fue lo peor. Unos meses después descubrió que su marido, con quien había compartido 14 año, tenía una amante.

La mujer se enteró que su marido y su amante se referían a ella diciéndole «vaca» y otros términos despectivos. Entonces, llegó el divorcio.

Fue entonces que le dio un giro drástico a su vida y cambió sus hábitos. «Yo lloraba después de cada rutina de ejercicios y fue ahí cuando determiné que esto no me iba a definir y que iba a cambiar por mí y por mi hija”, recordó. «Yo quería que ella estuviera orgullosa de su mamá y ser un ejemplo para ella”, remarcó

Pero el esfuerzo valió la pena. Ayala agradece a su exesposo  y a la tercera en discordia por el «bullying”  que la motivó a cambiar su actitud y a llevar una mejor vida. Ya perdió aproximadamente 50 kilos.

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DC/EI