El gobierno de Estados Unidos colocó al vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, en su lista de personas relacionadas con el tráfico de drogas. El Departamento del Tesoro estadounidense anunció este lunes que considera que El Aissami «juega un papel importante en el tráfico internacional de narcóticos».
Según informó en un comunicado John E. Smith, director interino de la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), la inclusión del vicepresidente venezolano en la Lista de Narcotraficantes Especialmente Designados «marca la culminación de una investigación de varios años».
En este sentido, altos funcionarios de Estados Unidos insistieron en que no se trata de una reacción a su nombramiento como vicepresidente de Venezuela, en enero pasado. Pero, ¿de qué acusa en concreto el gobierno estadounidense al número dos del gobierno de Nicolás Maduro?.
Las acusaciones
De acuerdo con un comunicado de la OFAC, El Aissami ha facilitado el envío de grandes cargamentos de drogas, vía aérea y marítima desde Venezuela, además de proporcionar protección a otros traficantes.
«En concreto, El Aissami recibió dinero por facilitar el transporte de narcóticos propiedad del narcotraficante venezolano Walid Makled García», señala.
«También está vinculado a la coordinación de envíos de narcóticos al violento cartel mexicano Los Zetas, así como a la protección del capo narcotraficante colombiano Daniel Barrera Barrera y del narcotraficante venezolano Hermágoras González Polanco», añade.
La OFAC también afirma que El Aissami controlaba aeronaves que despegaban desde «una base aérea» en Venezuela y rutas usadas por el narcotráfico desde puertos del país.
«En el ejercicio de sus funciones anteriores, en varias ocasiones supervisó envíos de narcóticos de más de 1.000 kilos desde Venezuela, incluso algunos con destino final a México y Estados Unidos, o fue uno de los dueños de esos cargamentos de narcóticos», dijo la OFAC.
Ni El Aissami ni Maduro ofrecieron respuestas a estas acusaciones de forma inmediata. Este abogado y criminólogo de 42 años fue uno de los hombres de confianza de Chávez y es visto como uno de los posibles sucesores en el liderazgo del chavismo.
DC|BBC