Para que no se ponga negra por el proceso natural de oxidación, sin importar si está picada o completa, checa estos sencillos trucos:
1. REMÓJALAS EN REFRESCO 3 MINUTOS PARA CREAR UNA ‘CAPA PROTECTORA’
Si se trata de frutas cerradas, sumérgelas en medio litro de refresco de limón para que los ácidos de la bebida las recubran y no entren en contacto con el aire.
2. ROCÍALAS CON 5 GOTAS DE LIMÓN Y LOGRA UNA ACCIÓN ANTIOXIDANTE
Si ya la picaste o le quitaste la cáscara, agrega limón para que no les salgan manchas.
3. NO LAS CORTES CON CUCHILLOS VIEJOS, PORQUE DEJAN SALES DE HIERRO
Estos residuos, así como los ácidos orgánicos, aceleran al doble el proceso de oxidación de la fruta.
DC|TVN