Maracaibo
Hay que tener veneno en la sangre para llevar a cabo una atrocidad de esta índole, una madre desalmada intentó vender a su bebé recién nacida ayer durante horas del mediodía en las instalaciones de La Maternidad Castillo Plaza por la suma de 500 mil bolívares.
Lo tramó con mucha antelación, pero definitivamente de la justicia divina nadie se salva y el plan que había orquestado con la descarada compradora de la neonata se le cayó en un abrir y cerrar de ojos.
La malvada «madre» Angie Salinas, quien contaba con 39 semanas exactas de gestación, sintió los dolores de parto la madrugada del martes y dejó a sus otros tres hijos pequeños bajo el cuido de una de sus vecinas, inmediatamente llamó a su cómplice María Alejandra Rosado de Nuñez para notificarle que en cuestión de un par de horas tendría en sus manos a la criatura.
Así fue, ambas mujeres en complicidad también con dos vigilantes internos del recinto hospitalario llegaron a la referida maternidad y tras dar a luz a la hermosa niña, con un peso de 3 kilos 200 gramos y medidas de 50 centímetros, esta fue custodiada por un vigilante identificado como Rigoberto García, de quien se conoció además que es la pareja de la jefa de emergencias del recinto hospitalario.
Garcia resguardó a la infante para cuadrar el negocio al mediodía de ayer. En el hecho está involucrada también una mujer vigilante de quien hasta ahora se desconoce su papel en el hecho y su identidad.
Al descubierto
Con lo que no contaba este cuarteto es que la vecina con la que la parturienta había dejado a sus otros tres pequeños, llegaría al referido hospital a buscarla, en vista del tiempo que había transcurrido y la mujer no regresaba a casa.
Fue entonces cuando al llegar preguntó por Salinas y al dirigirse al cuarto en donde se suponía debería estar descansando tras la labor de parto, se encontró con la compradora en cuestión acostada en la cama simulando haber sido la madre biológica.
Vendedora y compradora en complicidad con los vigilantes hicieron el cambio de puestos dentro del hospital y en el registro aparecía el nombre de la compradora- hasta ahora desconocido- por lo que la vecina al llegar y encontrarse con la madre equivocada, alertó al personal de seguridad y la trama se les cayó enseguida.
Trascendió que ambas mujeres están detenidas y la recién parida no pudo cobrar los 500 mil bolívares por la venta de la cuarta de sus hijos.
Trascendió que la aprehensión de las mujeres y los vigilantes fue practicada por efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Hasta el día de ayer, se esperaban en las instalaciones del hospital la presencia de jueces y representantes del Consejo Estadal de Derechos del Niño y adolescente (Cedna).
DC/Qué Pasa