El parlamento de la República Popular de Bangladés, ubicada al sur de Asia, aprobó esta semana una nueva ley que permite los matrimonios infantiles en “casos especiales”, lo que obligaría a las víctimas de abusos sexuales a casarse con sus abusadores, incluso si son menores de edad.
“Nos preocupa que esta nueva ley pueda desencadenar abusos generalizados, legitimar violaciones legales, permitir que los padres puedan obligar a sus hijas a casarse con sus violadores y alentar aún más la práctica del matrimonio infantil en un país con una de las tasas más altas del mundo, pues la edad mínima para el matrimonio sería cero”, dijo en un comunicado el grupo de activistas The Girls Not Brides.
La edad legal para casarse en el país asiático es 18 años para las mujeres y 21 para los hombres, pero esta nueva ley propone excepciones que han denominado como casos especiales, los cuales, a juicio de la ministra de Asuntos de la Mujer y los Niños, Meher Afroze Chumki, “los funcionarios confirmarán próximamente en qué consisten”.
En estos momentos, el país tiene la segunda tasa de matrimonio infantil más alta del mundo: un 52% de la población se casa a los 18 años y un 18% a los 15, de acuerdo con Unicef. Si finalmente es aprobada por el presidente esta ley todo indica que la tendencia irá en aumento.
DC/LN