La mujer tiene un valor importante en nuestra sociedad Venezolana y ha demostrado día a día, que no solo es bella, sino que también se puede desempeñar y ser exitosa tanto como el hombre en cualquier área, hoy ha tomado una posición más activa e importante en el mundo empresarial y ha demostrado liderazgo exitoso y oportuno a la hora de tomar decisiones, ellas emprenden, deciden y actúan, toman iniciativas y gracias a la constancia, consiguen sacar adelante sus ideas o proyectos.
Dios nunca le dio a la mujer un lugar desfavorable, ni fue creada inferior al hombre, Génesis (Santa Biblia) 1:27 dice: “Dios procedió a crear al hombre a su imagen, a la imagen de Dios lo creó; macho y hembra los creó”. Así que tanto el hombre como la mujer fueron creados con la capacidad de reflejar la personalidad e imagen de Dios. Y a pesar de tener una constitución física y emocional diferente, su Creador les encargó la misma comisión y les otorgó los mismos derechos, léase en Génesis (Santa Biblia) 1:28-31).
En muchos países la sociedad termina tratándolas, solo como un objeto de deseo, siendo víctimas de explotación y abusos, violando sus derechos humanos, entre ellos muchos medios comerciales que han usado su imagen con metas mercantilista, degradando su verdadero valor.
En ese sentido el estado Venezolano moderno, con la apertura de la democracia desde sus inicios, hizo grandes esfuerzos para brindar igualdad de condición y derecho a la mujer venezolana, desde muy niñas, brindándoles, educación, nutrición, espacios culturales y deportivos de primera línea, leyes de igualdad, logrando incorporarse en cualquier área, demostrando alta capacidad y responsabilidad, lo que permitió como logro elevar a la mujer y llevándola a un estatus de vida mejor, sacándola de las limitantes que por razones culturales y económicas muchas de ellas se veían sumergidas.
La mujer Venezolana es emprendedora, trabajadora, responsable, pero sobre todo protectora, protectora de la familia, de los hijos, no importa que papa no este, mama de una forma digna y decenté se las arregla, pero en la casa no falta nada y no es solo protectora de su familia, la mujer venezolana es una buena vecina, pendiente de pasarle el platico de caraotas al vecino, en enfermedad acompañar y apoyar de diferentes formas al vecino y ver si en su casa tiene alguna medicina que el vecino pudiera necesitar.
Pero las cosas cambiaron en Venezuela y no para bien por cierto, nuestra amada Venezuela, tierra fundada con los más altos valores humanos, cuyas bases fundacionales e históricas nos conducían a ser uno de los países más prósperos de la región, hoy vive el peor momento de su historia, por políticas erradas de un gobierno egoísta, cuyo proyecto de país, sociológicamente inaplicable, por lo que ha conducido al país, por la mas difícil situación política, económica y social, nunca antes vivida, esto contribuye ha desmejorar física y anímicamente a sus ciudadanos, ciudadanos sicológicamente matriarcales, pues por tradición son nuestras mujeres, que con su esfuerzo y trabajo han logrado sacar adelante la familia.
La mujer de la Venezuela del socialismo del Siglo XXI ve frustrada sus esperanza de sacar a delante a la familia, por q el gobierno, que debe velar por brindar las más mínimas condiciones de seguridad social, no ha trabajado para que el país tenga estabilidad social y económica, convirtiendo en una vulgar estafa su propuesta de gobierno llamada el socialismo del siglo XXI, esto ha incrementado los niveles de inseguridad, desempleo, hambre y por ende desnutrición y muerte infantil.
Valla pues una bendición y un abrazo lleno de fe y optimismo a la mujer y en especial a la zuliana y que Dios nos ayude a salir, de esta etapa de atraso donde nuestra mujer venezolana ha sido las más afectadas.
DC / Alberto Parra Fuenmayor / Dr. Teología – Abogado – Escritor – Activista de DDHH / parra_eduardo777@ hotmail.com / @eduardo_parraf