La policía de Columbus, Ohio, está investigando a un empleado que borró accidentalmente unos 100.000 archivos de vídeos grabados por cámaras de autos patrulla.
La mayoría de los archivos borrados el 8 de mayo eran del 2015. Agregó que están investigando si los archivos pueden ser recuperados. No está claro cuál sería el efecto de la pérdida en casos pendientes, agregó.
La Oficina de Servicio Técnico de la agencia se dio cuenta la semana pasada de que los archivos habían sido borrados, dijo la policía.
Jacobs añadió que uno de cada cuatro de los archivos involucra grabaciones que no serían relevantes para asuntos criminales.
DC/P