El diputado venezolano, Carlos Paparoni, aseguró que el Gobierno pagó US$ 2.100 millones de dólares a dos compañías brasileñas que vendían productos vencidos. El entonces presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, firmó en 2015 un contrato para importar carne por dicha cantidad.
“Han gastado 2.100 millones de dólares comprando a JBS y BRF, compañías que venden comida vencida (…). Están comprando carne y productos podridos para poder importarlos“, dijo el parlamentario durante su intervención en el Parlamento. Señaló que estas empresas son las que más exportaron carne hacia Venezuela desde 2011 mendiante acuerdo con la Corporación Casa.
“Pagan siete dólares por cada kilo de alimento, de carne que le están comprando a Brasil, con esa cantidad nosotros podemos producir 14 kilogramos más (…) y ellos prefieren comprar carne podrida a Brasil“, prosiguió el parlamentario.
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