Un adolescente norteamericano terminó sin querer con su vida mientras manipulaba un arma de fuego y lo transmitía para sus amigos a través de Instagram Live.
Shaniqua Stephens, una madre de Atlanta, Georgia, confirmó con el video en Instagram que su hijo de 13 años, Malachi Hemphill, se disparó accidentalmente mientras sus contactos lo observaban manipulando un arma de fuego.
El lunes pasado, Stephens escuchó un «gran boom” en su casa, pero no podía determinar qué era la explosión que sacudió a su vivienda hasta que subió al cuarto del menor. «Tocamos la puerta. Lo encontramos tirado en un baño de sangre”, narró la madre a 11 Live.
La mujer agregó que el jovencito habría obtenido la pistola de un amigo, aunque ellos desconocían el hecho hasta que se concretó el desenlace fatal del chico de 13 años. La madre aseguró que inspeccionaban los perfiles de Malachi en redes sociales, pero que era imposible controlar, en su totalidad, lo que compartía. «Esto es un dolor que nunca se va a ir. Él era mi único hijo. Solo tenía 13. El mero pensamiento de verlo en el suelo, no se me va a ir de la cabeza”, lamentó.
DC/EI