Marco Coello quedó detenido hoy cuando acudió a entrevista sobre proceso de asilo en Miami #26Abr
El joven venezolano Marco Coello, que fue torturado por su participación en las protestas opositoras del 2014 en Caracas y huyó a Estados Unidos en septiembre de 2015, fue detenido este miércoles por autoridades federales de Inmigración.
Su abogada, Elizabeth Blandon, denunció a el Nuevo Herald que el joven, a quien llamó “un héroe en Venezuela” y un “prisionero político”, fue arrestado en la mañana cuando se presentaba a su entrevista en la oficina de asilo de Miami por su caso migratorio.
Blandon dijo que Marco Aurelio Coello fue detenido antes de que se le hiciera la entrevista, una situación que enfatizó nunca ha visto durante sus años como abogada. “Esta es una farsa de la justicia”.
La abogada contó que el oficial de migración explicó que ni siquiera iba a “entretener” el caso y afirmó tras la detención, que el joven se había sobrepasado en su visa de turista.
Blandon repudió este alegato y reiteró que quienes piden asilo en Estados Unidos se sobrepasan la visa debido a que las oficinas de inmigración tienen un retraso de más de 3 años. Aclaró además que Coello no estaba ilegal porque estaba en el proceso de asilo y tenía hasta un permiso de trabajo otorgado por el gobierno federal.
Blandon cree que Coello fue llamado a inmigración con la intención de detenerlo, pues su caso había sido adelantado sorpresivamente.
Junto a la abogada se encontraba el padre del joven venezolano, Armando Coello, quien con los ojos llorosos dijo sentirse preocupado y triste porque, aseguró, su hijo vino a Estados Unidos tratando de salvar su vida.
“Mi hijo buscaba lo que nunca le ofrecieron en Venezuela. Fue emocionado a la entrevista, se afeitó y se puso su mejor ropa”, contó el padre.
Coello está en el centro de detención de Krome. Sus abogados presentarán mociones de emergencia para que sea liberado a la brevedad, pero estiman que puede tardar algunos días.
Al ser consultada sobre la posibilidad de Coello sea deportado, la abogada Blandon respondió que ante lo inusual del caso, todo es posible aunque temen por la seguridad de Coello si regresa a Venezuela.
Para esta nota se ha intentado contactar a las autoridades de ICE, pero no han respondido hasta el momento.
Tanto su padre como sus abogados temen por la salud de Coello, quien ha sufrido depresión y problemas psicológicos tras haber sido torturado por el gobierno de Venezuela luego de ser detenido el 12 de febrero de 2014 en Caracas por su participación en las masivas protestas convocadas por la oposición.
De acuerdo con el diario El Nacional de Venezuela, su madre Doris Coello dijo el 18 de mayo del 2014 que su hijo había sido torturado física y psicológicamente con el intento de que firmara una confesión con delitos que él no cometió.
Su caso recibió mucha atención nacional e internacional por ser una de las primeras denuncias de estudiantes que recibieron torturas por organismos de seguridad venezolanos tras ser detenidos por manifestarse.
Coello huyó de Venezuela en septiembre del 2015 luego que le dictaran una medida cautelar de libertad en la que debía presentarse cada 7 días por los problemas de depresión que estaba padeciendo. A los días de su llegada a Estados Unidos, inició su proceso por asilo político.
“Hasta el gobierno de Venezuela lo liberó”, espetó la abogada en señal de resignación.
Tras su huida, el gobierno de Venezuela pidió una orden de captura a la Interpol pero uno de los abogados de Coello, Richard Rivas, aseguró el miércoles que en esa agencia internacional no hay petición por ningún venezolano llamado Marco Coello.
La sorpresiva detención de Coello llega que a una semana que expertos advirtieran a el Nuevo Herald que más de la mitad de los más de 23,000 solicitudes de asilo de venezolanos introducidas en los últimos dos años podrán ser negadas por desconocimiento o mal asesoramiento.
Los venezolanos se han convertido en los ciudadanos que más piden asilo político en Estados Unidos, con un total de 18,150 peticiones el año pasado. Han incluso superado las 17,745 solicitudes de China.
DC | El Nuevo Herald