En medio de un juego, una mascota del quipo de béisbol Florida Gators de la Universidad de Florida en Gainesville en Florida, Estados Unidos salvó a un niño de ser golpeado fuertemente en su cara.
El jugador de los Gators batea la pelota y la misma sale disparada a las tribunas ubicadas cerca de la primera base, en la misma hay un pequeño sentado junto a un gran Cocodrilo que es la mascota oficial del equipo.
De forma rápida, la mascota intenta detener la bola con sus manos pero finalmente recibe el pelotazo en su hocico y fije un desmayo para hacer sonreír al pequeño.
DC/P