La profesora Mónica Kräuter, licenciada en Química de la Universidad Simón Bolivar, preparó un documento sobre las acciones a tomar frente a un ataque con BOMBAS LACRIMÓGENAS:
Según la especialista lo primero que se debe hacer es evitar correr, hay que caminar, puesto que si se corre, la persona hiperventila y tragará más polvo químico.
La creencia de que debe lanzarse la persona al piso, para evitar ser alcanzado es falsa. Ella recomienda no tirarse al piso: «moverte te hará menos vulnerable y además, el polvo siempre va a caer al piso, si estás allí, acumularás más».
Advirtió que para neutralizar químicamente el efecto, las personas expuestas necesitan un paño limpio que le cubra la nariz y la boca, humedecido con bicarbonato de sodio diluido en agua, o algún antiácido como el Maalox. «No uses vinagre porque también es un ácido».
No usar crema dental porque su densidad atrapa el polvo e inhalarás más. ¡Me arde!. Para la irritación ocular recomendó dejar lagrimar los ojos, tratar de no tocárselos ni rascárselos. Lo ideal es lavarlos luego con mucha agua, de arriba a abajo.
Fundamental es tratar de respirar siempre por la nariz, nunca por la boca. Pasado el ardor, un caramelo ayudará a disipar un poco el efecto en la boca y la garganta.
Si pasado un tiempo prudencial, persiste la irritación en la piel, se debe usar Caladryl o algún equivalente.
Al llegar a tu casa:
DC|NP