Equipar un hogar en Venezuela cuesta más de 8 millones de bolívares. Son 174 los salarios mínimos necesarios para, entre ofertas y promociones, adquirir los electrodomésticos de la línea blanca (hornillas, lavadora, secadora, nevera y campana) y otros 27 sueldos destinados a un par de productos de la línea marrón, como el televisor y el equipo de sonido. En total, se requieren 201 meses de ahorro para comprar los principales artículos de uso doméstico.
En los establecimientos más reconocidos de Caracas, un tope de cuatro hornillas está entre 570.000 y 1.725.000 bolívares; la nevera más económica cuesta 1.599.900 y puede llegar a 5.000.000 de bolívares si cuenta con congelador y tiene más de 20 pies; las lavadoras tienen un valor mínimo de 1.100.000 bolívares, cifra que aumenta a 3.700.000 si el electrodoméstico posee secadora, mientras que las campanas están entre 315.000 y 325.000 bolívares.
En cuanto a la línea marrón, empleados coinciden en que el televisor sigue siendo el artículo más vendido. El electrodoméstico presenta una oferta variada tanto en modelos como en precios. Los costos están entre 480.000 y 9.900.000 bolívares, cantidad de dinero que alcanzaría para equipar un hogar con artículos de gama baja.
El segundo producto más ofertado de la línea es el equipo de sonido. Los montos están entre 600.000 y 2.000.000 de bolívares.
Precios inasequibles. El diputado José Guerra informó en febrero que la inflación de 2016 se ubicó en 550%, según aproximaciones realizadas por la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional ante la falta de datos oficiales del Banco Central de Venezuela. Dijo que el constante incremento de precios merma la capacidad adquisitiva y disminuye la posibilidad de ahorro del venezolano.
“Los costos están para sentarse a llorar. Todo está excesivamente caro. Se me quemó la cocina y vine a ver si podía comprar algunas cosas, pero los precios están imposibles. Hace dos años compré un juego de ollas en 11.000 bolívares, hoy ese mismo juego está en 800.000”, dijo una señora en un comercio localizado en Los Dos Caminos.
El precio de los electrodomésticos varía según la cotización del dólar. “Nosotros aumentamos o disminuimos los precios dependiendo del dólar. En ocasiones hemos tenido que hacer aumentos drásticos de un día para otro, pero no tenemos otra alternativa”, indicó el encargado de una tienda en Chacao.
DC/EN