El Manchester City se impuso con más apuros de los previstos al Leicester City en el Etihad Stadium (2-1) y se colocó temporalmente tercero en la Premier League.
Con estos tres puntos, los hombres de Pep Guardiola se asientan en puestos de Liga de Campeones y sólo un descalabro en sus últimos dos partidos de la campaña evitaría que el City no estuviera la temporada que viene en la máxima competición continental.
El español David Silva adelantó, al filo de la media hora, a los de casa con un gol que no estuvo exento de polémica, ya que el disparo del futbolista canario desde el corazón del área estuvo cerca de tocarlo en posición de fuera de juego Raheem Sterling. Sin embargo, pese a las protestas de los hasta ayer campeones de Inglaterra, el tanto subió al marcador.
El duelo se le puso todavía más de cara a los azules de Manchester en el minuto 36, cuando Yohann Benalouane cometió un infantil penalti sobre Leroy Sané que no falló Gabriel Jesús. El internacional brasileño engañó a Kasper Schmeichel, festejó su quinto tanto en 8 partidos de liga y dobló la ventaja de los suyos.
DC/M