Puerto Rico anunció el cierre de 184 escuelas públicas, como medida de recorte de inversión social ante la presión fiscal impuesta por el país del norte.
Con esta medida esperan «ahorrar» 7,7 millones de dólares que se invierten en servicio de agua y luz, fue anunciada por el Departamento de Educación de ese país. El cierre se finiquitará al finalizar el año escolar en curso.
El Departamento de Educación excusó la decisión que afecta 27.000 estudiantes y unos 2.088 profesores como plan de rediseño del sistema público de enseñanza, que fue repudiado por la Federación de Maestros de Puerto Rico (FMPR).
«De lo que se trata es de ahorrar dinero para pagar una deuda ilegítima que el gobierno se niega a auditar por temor a que se revelen las irregularidades. Para el Departamento de Educación los niños parecen ser una mera cifra», denunciaron los miembros de FMPR en un comunicado.
«El llamado rediseño del sistema representará precariedad en el sistema educativo, hacinamiento de estudiantes e inaccesibilidad de los menos privilegiados a una formación de calidad», agrega el texto de la FMPR.
DC/G