Cuba acusó este jueves a la Organización de Estados Americanos (OEA) de mantener un «silencio cómplice» ante los ataques ocurridos el pasado martes en Caracas contra el Tribunal Supremo y el Ministerio del Interior, y rechazó el uso del «terrorismo y la injerencia externa» en Venezuela.
El Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) de la isla afirmó en una declaración divulgada por la televisión estatal que «no sorprende que la OEA y su secretario general (el uruguayo Luis Almagro) se conviertan, con su silencio, en cómplices de lo ocurrido o de lo que pueda ocurrir».
Además de condenar «enérgicamente» el ataque a las instituciones venezolanas, la Cancillería cubana considera «injustificable» que algunos gobiernos y figuras políticas «en vez de expresar una oposición resuelta y directa a estos actos terroristas y golpistas, los presenten como una supuesta rebelión policial».
Asimismo critica que se «manipule» esas acciones «para incitar a la fractura de la unión cívico-militar» y «atacar la digna decisión del presidente Nicolás Maduro de impedir el caos y llamar a la legítima defensa del orden constitucional».
La declaración cubana rechaza «resueltamente el uso del terrorismo y la injerencia externa en Venezuela» y reitera la «más firme solidaridad» del país caribeño con la Revolución Bolivariana y sus líderes.
DC/GB