Este domingo efectivos policiales, informaron que un niño de cinco años falleció en un centro de refugiados de Arnschwang, en Alemania, luego de ser apuñalado por un hombre de origen afgano que fue posteriormente abatido por la Policía.
El agresor, de 41 años, atacó al pequeño y a su madre, una mujer de 47 años y de origen ruso, con un arma blanca. Se desconocen los motivos del ataque.
El hermano mayor de la víctima fue testigo de la escena y sufrió un shock. Otras personas que fueron presenciaron el crimen, entre ellos varios agentes, también se vieron afectados por la conmoción.
Ahora las autoridades estudian si era procedente la intervención con armas de fuego. Asimismo, los investigadores centran sus pesquisas en esclarecer cuál era la relación entre el atacante y las víctimas.
DC/EN