La epidemia de programas destructores de datos que paralizó computadoras alrededor del mundo ha sido controlada en Ucrania, su probable punto de origen, dijeron las autoridades el miércoles, mientras empresas y gobiernos analizaban el costo de una crisis que trastorna, puertos, hospitales y fábricas.
«Todos los bienes estratégicos, incluso los utilizados en la protección de la seguridad estatal, funcionan normalmente», dijo el gabinete ucraniano en un comunicado difundido el miércoles.
No pudo decir lo mismo el principal puerto de contenedores de la India, donde una de las terminales estaba paralizada por el software maligno conocido como ExPetr y otros nombres.
M.K. Sirkar, un gerente en el Jawaharlal Nehru Port Trust en Mumbai, dijo que no se pudo cargar ni descargar contenedores en la terminal operada por la naviera A.P. Moller-Maersk el miércoles.
Moller-Maersk dijo en un comunicado que sus terminales APM habían sufrido «impactos en varios puertos» y que cerró varios sistemas «para contener el problema». La empresa se negó a brindar más detalles o permitir que alguno de sus funcionarios hiciera declaraciones.
Al menos miles de computadoras en el mundo han sido atacadas por el malware, según informes preliminares de firmas de ciberseguridad, aunque la mayor parte de los daños siguen ocultos en oficinas empresarias. Algunos nombres se han filtrado al dominio público a medida que los trastornos se vuelven evidentes.
En Pennsylvania, el sistema de salud Heritage Valley cerró sus servicios de laboratorio y diagnóstico. En Tasmania, la fábrica de chocolates Cadbury detuvo la producción ante la caída de las computadoras.
Otras empresas afectadas incluyen al fabricante de medicamentos estadounidense Merck, la de alimentos Mondelez International, el bufete de abogados DLA Piper o el grupo publicitario WPP con sede en Londres.
Mientras los especialistas buscaban recoger los escombros, otros se preguntaban sobre los motivos del ataque. El ransomware, que consiste en apoderarse de los datos hasta que se paga rescate, ha conocido un crecimiento explosivo en los últimos años, impulsado en parte por la popularidad creciente de Bitcoin y otras monedas digitales. Pero algunos creen que el objetivo del ataque más reciente no era cobrar rescate sino enviar un mensaje a Ucrania y sus aliados.
DC/AP