Un marido ha matado a su mujer en China después de obligarle a abortar hasta en cuatro ocasiones porque quería un hijo varón. La víctima ha fallecido en un hospital después de que su organismo no soportase tal cantidad de abortos en tan sólo un año.
La mujer había tomado dicha decisión obligada por su marido, que al parecer le insistía una y otra vez en que su descendencia debía ser masculina y no femenina. La mujer, sin embargo, había engendrado niñas en todas las ocasiones.
La mujer, que se encontraba ya en mal estado de salud, cayó gravemente enferma, lo que llevó a que finalmente la pareja se divorciara. Sola, decidió buscar ayuda en el hospital para que pudieran salvarse la vida. De hecho, el Gobierno reconoció los agravios y le brindó 2.000 dólares para que pudiese tratar sus problemas.
Pero no fue suficiente. Su delicado cuerpo no pudo soportar los cuatro abortos que sufrió tan sólo en tan sólo un año y terminó muriendo. El marido, por su parte, se desentendió del problema, no fue a visitarla en ningún momento al hospital y ahora busca conocer a otra mujer con la que poder contraer matrimonio de nuevo y poder tener su ansiado hijo varón.
La situación parte por la obsesión que se mantiene en la cultura china, muy machista, y que da especial relevancia a los hijos varones. No tener uno es una deshonra para toda la familia, ya que se vincula el trabajo con el género masculino y no con el femenino.
Por todo ello, el Gobierno impide de manera oficial que las parejas conozcan el sexo del bebé antes de dar a luz. El problema llega con las clínicas clandestinas que permiten conocerlo a través de pruebas de Rayos-X que, por otro lado, son perjudiciales para la salud del pequeño.
Además, hay padres que asesinan a sus propias hijas cuando nacen y descubren que no son varones, lo que dificulta enormente el trabajo de las autoridades para controlar y atajar este tipo de problemas.
De hecho, el Ejecutivo se ha visto obligado a retirar la política del ‘hijo único’ con el que se pretendía controlar el alto incremento poblacional del país asiático, con el fin de poner coto a esta problemática. De nada ha servido: este tipo de noticias siguen siendo un constante en una de las principales potencias a nivel mundial.
DC | Los Replicantes