Neymar fue presentado por el París Saint-Germain el pasado sábado, poco antes de que el equipo disputase su partido frente al Amiens (2-0), pero el brasileño no pudo jugar al no contar con el transfer. Hoy domingo en la cancha del Guingamp será su gran estreno.
Ahora todo está en orden para que el delantero debute en el que será el duelo más esperado de la segunda jornada en la Ligue 1.
“Está para jugar todos los minutos” del partido, dijo el entrenador del PSG, el español Unai Emery, en referencia a su nuevo pupilo, a quien se le vio a principios de semana disfrutando junto a unos amigos de las playas de Saint-Tropez.
“Se entrena bien y, con el trabajo que hacemos, está conociendo mejor a sus compañeros. Hemos ensayado la estrategia y los saques de falta”, agregó el técnico.
“Queremos que esté en el once titular porque es un jugador que el grupo necesita”, abundó Emery.
El PSG no será el único beneficiado de la eventual presencia del astro brasileño. También el Guingamp, al menos en términos de publicidad, pues el partido será seguido por millones de espectadores de todo el mundo.
En este sentido, el presidente de la entidad del oeste de Francia, Bertrand Desplat, dijo estar “orgulloso” del repentino protagonismo que ha tomado su equipo, aunque matizando que no quiere arrebatarle “la fama a quien le pertenece”.
Si los seguidores de Neymar quieren hacerse con una entrada para el partido del domingo lo tienen imposible. El aforo (17.000 plazas) está completo desde hace una semana. Algo que el entrenador local, Antoine Kombouaré, no achaca a la presencia del brasileño, sino a las ganas del público “de ver al Guingamp ganar”.
“La gente aquí no habla de Neymar, sino de su club. Los espectadores quieren al Guingamp”, agregó Kombouaré, antiguo jugador y entrenador del PSG.
“He conocido equipos en los que se habla de las estrellas a las que se van a enfrentar. Aquí, sin embargo, nos abstraemos de todo lo que se dice, de todo lo que concierne a Neymar y al PSG”, abundó.
En el resto del mundo del fútbol, la situación es distinta: solo interesa lo relacionado con el capitán de la Verdeamarela. Es así desde que ‘Ney’ dejó el Barcelona tras el pago de 222 millones de euros por parte del club francés, que convirtieron al brasileño en el fichaje más caro de la historia de este deporte.
Además de sorpresa, el traspaso también ha despertado sospechas en algunos círculos. Es el caso Asociación de Clubes Europeos (ECA), reunido el pasado jueves en Madrid.
Tras la reunión, el presidente del Lyon, Jean-Michel Aulas, declaró al diario L’Equipe haber detectado “cierta acritud y envidia” entre los mandatarios de algunos de los clubes asistentes a la cita.
DC/UR