El último fin de semana del mes de septiembre de cada año es la fecha elegida por la capital alemana para la celebración del, considerado por muchos, mejor maratón del mundo, y motivos no les faltan.
Berlín es el maratón donde más récords mundiales se han batido. Hasta en 10 ocasiones se rompió la marca mundial sobre su trazado (3 veces en categoría femenina, y 7 categoría masculina) además de las últimas plusmarcas mundiales, sobre su circuito se han logrado algunos de los hitos más importantes de la prueba. En el año 2001 la Japonesa Naoko Takahashi se convirtió en la primera mujer de la historia en correr un maratón por debajo de las 2 horas y 20 minutos.
Paul Tergat fue el primer hombre en correr un maratón por debajo de las 2 horas y 5 minutos en el año 2003 también en Berlín y en el año 2008, el gran Haile Gebrselassie fue el primer atleta que rompió la barrera de las 2 horas y 4 minutos. Kimetto fue le último de los grandes fondistas en sumarse al carro de actuaciones históricas sobre el trazado Berlinés, cuando en el año 2014 rompió la barrera de las 2 horas y 3 minutos para marcar unos estratosféricos 2:02:57 que a día de hoy figuran como récord mundial de la distancia.
Con esta carta de presentación pensar en Berlín es pensar en récord mundial.
Al contrario que otras grandes maratones, Berlín tiene todo lo que una gran prueba necesita para establecer una plusmarca mundial, circuito, clima, publico, dinero y por supuesto, atletas.
Estos últimos son siempre los grandes protagonistas, los artífices de las grandes carreras y de las marcas estratosféricas, los que hacen de Berlín la mejor maratón del mundo.
Para esta edición lo mejor de lo mejor del panorama actual, estará en la capital alemana:
Eliud Kipchoge, Kenenisa Bekele y Wilson Kipsang encabezan un cartel de salida que solo de leerlo nos pone la piel de gallina. 3 de los 4 hombres más rápidos de la historia sobre la distancia (solo falta Deniss Kimetto) estarán en la línea de salida de la prueba germana.
Tres superclases del fondo mundial con un único objetivo: batir el récord mundial, porque ganar en Berlín, no vale. La organización lo busca y los atletas saben que ponerse en la línea de salida de esta prueba es ponerse en una carrera contrarreloj de 42 kilómetros y 195 metros donde el gran objetivo es arañar segundos al crono del Keniano Kimetto.
Kipchoge llega en un estado de forma espectacular y es el gran candidato a todo. Tras su exhibición dentro del proyecto Breaking2h de la firma américa que le patrocina, el Keniano se ha convertido en el gran candidato a romper el récord mundial, inclusohay quien se aventura a asegurar que Kipchoge está para correr en Berlín por debajo de las 2 horas y 2 minutos, una proeza cuando menos increíble y es que para las 2 horas y 25 segundos marcadas en Monza contó con muchas ayudas (liebres que entraban y salían , el coche con una pantalla aerodinámica y los avituallamientos a voluntad) habrá que ver si aquí, sobre un gran trazado pero con menos ayudas es capaz de volver a mostrar todo ese potencial.
Kipsang es un atleta capaz de todo. Alabado por los técnicos como un atleta ejemplar y muy profesional, que se cuida y sabe gestionar a la perfección su carrera deportiva dosificando esfuerzos y realizando buenas y acertadas preparaciones. Ya ha demostrado en la edición del año pasado que es un hombre a tener en cuenta. Corrió allí 2h03:13 en una prueba donde dio la cara desde el kilómetro 25 realizando buenos ataques que hicieron posible el gran crono final logrado a posteriores por Kenenisa Bekele, que en esta historia es el tercero en discordia.
Bekele es la gran incógnita pero que nadie dude de su gran calidad y talento para el noble arte del correr. Si el genio etíope tiene su día es capaz de todo.
Bekele llega a Berlín como defensor del título, entre medias corrió dos maratones, uno en Dubái donde se vio obligado a retirarse tras caerse en la salida y otro en Londres donde Bekele, que a posterior de la carrera afirmó que tuvo problemas con las zapatillas que no le dejaron correr cómodamente, fue 2º. Desde Londres ha pasado totalmente desapercibido, se ha centrado en su preparación y su círculo más íntimo comenta que está mejor que cuando el año pasado corrió 2h03:03
Kipsang corrió este año en 2h03:58 sobre el difícil y duro trazado de Tokio, una gran marca que deja a las calaras que el atleta de Keiyo District tiene cuerda para rato a pesar de contar ya con 35 años de edad (cumplidos en el mes de marzo)
Por su parte, Kipchoge ha centrado toda su temporada en dos eventos: El de Monza, donde renunciando a participar en el mundial, buscó ser el primer hombre en correr por debajo de las 2 horas. Se quedó a 25 segundos de lograrlo, pero durante gran parte de la prueba estuvo por debajo de la barrera de las 2 horas lo cual se celebró como un gran éxito. Y este maratón de Berlín, al que había prometido volver después del famoso incidente de la zapatilla de la edición del 2015 cuando corrió en 2h04:00 con las plantillas de sus zapatillas saliéndose de las mismas desde el primer kilómetro.
Comparativas según parciales de 5km de las mejores marcas logradas por los tres grandes protagonistas de esta nueva edición del Maratón de Berlín:
Kipchoge fue el mas rápido de los 3 en su mejor maratón hasta el kilómetro 15, claro que se vio beneficiado de la siempre rápida salida de la maratón de Londres donde los primeros compases de la carrera favorecen para correr rápido.
Kipsang y Bekele corrieron muy parejo en Berlín el año pasado y fruto de ello desde el km 15 hasta el 25 marcaron mejores parciales que Kipchoge en Londres, este último marcó un mejor tiempo de paso por el kilómetro 30 en la capital británica, sin embargo el final de Kipsang y sobre todo Bekele (que fue capaz de correr los últimos 2 kilómetros y 195 metros de la maratón Alemana del 2016 en 6:08” lo que significa que corrió ese ultimo tramo a una media de 2:47” el km) fueron mucho mejores que los de Eliud, claro esta que en estos parciales influyen varios factores, uno el circuito, y otro muy importante: Las liebres.
Berlín cuenta todos los años con un gran elenco de marca pasos, o pacers, o conejos, o como en nuestro país se les conoce: Liebres.
La labor de las mismas es fundamental en el buen devenir de la prueba y la estrategia a seguir desde la dirección de carrera donde se les marcan los tiempos de paso a cumplir es clave para la consecución de las grandes marcas. Por el contrario, Londres siempre se convierte en un corre calles, salidas fulgurantes con kilómetros iniciales cercanos a los 2:30” cuando el atleta tiene aun su organismo en letargo, lo que produce ya un gran consumo energético.
Esos pasos equilibrados son los que luego favorecen a que en los kilómetros finales el atleta pueda correr con frescura en esos compases en los que se fraguan los récords, a partir del kilómetro 30
En la edición pasada, las liebres de Berlín no cumplieron su objetivo y en el kilómetro 15 se caían del grupo de cabeza, ahí apareció Geoffrey Ronoh, liebre personal de Kipsang y que para la edición del año pasado se había apuntado para acabar la carrera. Un gesto de su líder fue suficiente para que este se colocara al frente de la prueba y marcase un ritmo por debajo del récord mundial hasta mas allá del kilometro 25, cuando sin fuerzas dejó que su protegido asumiera el peso de la prueba.
Ronoh será una de las liebres de esta edición. El altísimo atleta Keniano que acredita marcas por debajo de los 60:00” en la media maratón será una de las piezas claves de la prueba, junto a él, como buenos escuderos del grupo líder estarán atletas de la talla de Sammy Kitwara (59:47 en media maratón y 2:04:28 en Maratón) o Gideon Kipketer ( 59:53 en Media Maratón y 2:05:51 en Maratón).
La batalla con mayúsculas no defraudará, porque los que se ponen en la línea de salida de la Maratón de Berlín saben que ganar no vale, aquí se corre a por el récord del mundo.
E.