Al menos once personas murieron y dos resultaron heridas este sábado en un nuevo ataque del grupo terrorista Boko Haram en un campamento de refugiados en la localidad de Banki, en el noreste de Nigeria, informan medios locales.
Los yihadistas entraron en el campamento, que aloja a más de 45.000 personas desplazadas por los conflictos que asolan la zona, durante la noche y atacaron a los allí presentes con cuchillos, luego les robaron hasta la comida.
A pesar de la cercanía de unas instalaciones militares, los terroristas no llamaron la atención de los soldados al no utilizar armas de fuego o explosivos, aunque acudieron tras enterarse del ataque.
Boko Haram, que significa en lenguas locales “La educación no islámica es pecado”, lucha por imponer un Estado islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiana en el sur.
El grupo adquirió notoriedad internacional, incluso antes de proclamarse franquicia del Estado Islámico (EI) en África, al declarar su propio califato islámico en el norte de Nigeria.
Desde que la Policía acabó en 2009 con el entonces líder de Boko Haram, Mohamed Yusuf, los radicales mantienen una sangrienta campaña en la que han asesinado a más de 20.000 personas y cerca de 1,9 millones se han visto obligados a abandonar sus hogares.
DC/CD