En el mercado de Quinta Crespo hay una práctica que se comienza a repetir ante la escasez y altos precios de los alimentos: la venta de carne de perro luego de matar y despellejar al animal, según denuncias de vecinos del sector. Quienes realizan el desollamiento buscarían vender esta carne a comerciantes como si fuera de res.
“Los locos llegaron, desenvolvieron al perro, lo echaron en el piso y le empezaron a sacar los pelos y las tripas. Ahí estuvieron un rato. No quise quedarme viéndolos mucho”, relató un mototaxista de Quinta Crespo que atestiguó, al igual que otros vecinos, el hecho ocurrido el sábado.
Los ciudadanos, con ropas sucias, escogieron los alrededores del Instituto Nacional de Nutrición (INN) como su carnicería de turno.
Javier Chirinos, coordinador de Vente Venezuela, fue la primera figura influyente que denunció el hecho. Utilizó la ocasión para reprochar la gestión del régimen de Nicolás Maduro y criticar la donación de cinco millones de dólares a Estados Unidos por daños del Huracán Harvey.
“Esto es consecuencia de 18 años de miseria y socialismo. Nosotros tenemos la responsabilidad de denunciarlo, pero sobre todo de hacer lo necesario para cambiarlo”, señaló.
En agosto de 2016, en Twitter circuló la fotografía de un muchacho desollando un perro callejero muy cerca del mercado de Quinta Crespo.
Vecinos de la popular zona del centro de Caracas se preocupan por la carne que se vende en este conocido mercado. Advierten que dicha práctica no es tan inusual como el resto de los ciudadanos podrían creer que es.
DC | El Nacional