En una cárcel de Marion, Ohio, EEUU, un grupo de presos fabricaron dos computadoras con desechos de equipos viejos y tras algunos fallos en la electricidad aprovecharon para conectarse con la red de Internet de la prisión.
Un informe del inspector general de Ohio en el mes de abril reveló que los reclusos luego de construir los dispositivos los ocultaron en un techo “falso” para utilizar las computadoras, lo que les permitió en los cuatro meses que estuvieron accediendo a la red de la prisión sacar datos de algunos archivos de la cárcel, obtener accesos a áreas prohibidas del centro penitenciario e incluso solicitar tarjetas de crédito.
Los discos duros de las computadoras tenían materiales pornográficos y artículos de fabricación casera de drogas y explosivos, según informaron las autoridades de Ohio luego de investigar el caso.
Los funcionarios dentro de la penitenciaria indicaron que la investigación fue abierta luego de que en los registros de la red interna de la prisión el uso de límite diario había sido excedido por un usuario no registrado, lo que alertó a las autoridades para localizar los dispositivos.
Las computadoras finalmente fueron encontradas en un baño de la sala de deportes de la prisión.
DC | LV