Necesitas:
– 1 cucharada de miel
– ¼ de taza de crema de cacao
– 5 gotas de aceite de lavanda
– ¼ de taza de aceite de oliva
Hazla así:
En una olla, pon en baño María la crema de cacao y, ya que esté derretida, agrega el resto de los ingredientes. Revuelve con la ayuda de una cuchara. Cuando la mezcla adquiera una consistencia uniforme, viértela en un refractario de vidrio con tapa y métela al congelador por 30 minutos.
Uso:
Aplica sobre la cicatriz y deja que la piel la absorba. Úsala diario, y si quieres apresurar su efecto, hazlo en las mañanas y en las noches.
Día con día verás cómo la cicatriz se difumina y, al cabo de un mes, será imperceptible.
DC/S180