Se pronosticaba que el pitcheo de los Dodgers haría la diferencia en la Serie Mundial y eso fue lo que sucedió en el sexto juego cuando impusieron su control desde el montículo y ganaron por 3-1 a los Astros de Houston para empatar a 3-3 el «Clásico de Otoño» que se tendrá que definir el miércoles en el Séptimo Partido que será el decisivo.
Esta vez si, el relevo de los Dodgers hizo su trabajo a la perfección al ceder apenas dos imparables y una base por bolas en cinco entradas dominantes.Después del vertiginoso festival de bateo, que Houston ganó el domingo 13-12 en 10 entradas, el pitcheo hizo su aparición para ambos equipos, aunque fue mejor el de los Dodgers.
Los relevistas de los Dodgers encabezados por Brandon Morrow, que retiró a Alex Bregman mediante un rodado, para que las bases se quedaran llenas en el quinto acto, estuvieron intratables.El out 27 llegó con un ponche al boricua Carlos Beltrán, veterano de 40 años, que había entrado por los Astros como emergente.
G.