Este lunes el famoso cantante surcoreano Kim Jong-hyun, de 27 años de edad, falleció en un aparente caso de suicidio y dejó una carta de despedida en la que detalla su estado depresivo.
«Estoy roto por dentro. La depresión que lentamente me ha ido carcomiendo ya me ha devorado, y no he podido superarla. Es increíble lo mucho que duele. Nadie está más atormentado ni debilitado que yo», dice la carta escrita por el vocalista.
«Volverme famoso probablemente no era mi destino. Me dicen que por eso lo estoy pasando mal… ¿Por qué lo elegí?».
Se conoció que gracias a su hermana los agentes acudieron a un apartamento alquilado por Kim en Seúl, donde lo encontraron ya inconsciente por aparente inhalación de gases.
«Dime que esto es suficiente, que lo hice bien. Incluso aunque no puedas sonreír, no me despidas echándome la culpa. Lo hiciste bien, lo hiciste bien. Adiós», concluye la carta.
La policía de Seúl optó por no realizar una autopsia, opción que también apoya la familia del artista, dados los claros indicios de suicidio.
Kim debutó en mayo de 2008 como cantante principal de la formación SHINee, uno de los grupos masculinos de mayor renombre en el K-Pop, y a partir de ahí desarrolló una prolífica carrera también como solista y letrista, además de actuar puntualmente en cine y televisión.
DC/EN