Cada vez más familiares y amigos de inmigrantes en Estados Unidos que enfrentan una deportación se ven obligados a recurrir a plataformas como GoFundMe o YouCaring para poder pagar a los abogados, las fianzas y otros gastos. EFE
Dichas plataformas albergan más de dos mil peticiones de donaciones para inmigrantes alrededor del país y el número está en aumento, según activistas comunitarios como Benjamin Wood, vocero de Pomona Economic Opportunity Center, en el sur de California.
“Son familias que no tienen otra opción, ahora mismo estamos pidiendo ayuda para Marcelina Ríos, una vendedora de elotes (comestibles) que está detenida por inmigración y necesita de la comunidad”, dijo Wood a Efe.
Ríos fue detenida el pasado 13 de octubre por agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) y está peleando su deportación desde un centro de detención.
La familia no había querido divulgar el caso hasta ahora, pero los cinco hijos de Ríos, todos menores de edad, ya no tienen cómo enfrentar las obligaciones económicas y abrieron una cuenta pública para recolectar 2.500 dólares. En seis días han logrado reunir 400 dólares.
Otro caso es el de Osvelia Maldonado Gómez, cuya historia fue contada a través de redes sociales por sus familiares con el fin de recaudar 6.000 dólares para evitar su deportación, pero acabó siendo llevada a México el 5 de diciembre.
Teresa Tejada, directora de la Asociación Salvadoreña de Los Ángeles, aseguró a Efe que las peticiones de ayuda han aumentado en el último año y que la mayoría buscan representación legal gratuita. “Tenemos clínicas legales, pero no tenemos la capacidad económica para ayudarlos a pagar un abogado”, señala.
Annaluisa Padilla, presidente de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA), coincide con Tejada en que la necesidad de una representación pro bono (sin honorarios) ha aumentado bajo la Administración Trump, porque, a su juicio, está “acelerando una máquina de deportación de proporciones históricas”.
El problema es tan grave que AILA y American Immigration Council lanzaron la Campaña de Justicia de Inmigración para garantizar un debido proceso de los inmigrantes y extender el trabajo pro bono (gratuito) que hacen sus afiliados.
No obstante, los esfuerzos no alcanzan para proveer un abogado de inmigración a todos los afectados, ni para ayudar a las familias con los gastos que se derivan de un arresto o deportación.
El dinero para pagar las fianzas también está en la lista de necesidades. Un ejemplo es la petición que se hizo en nombre de Rosa López, una salvadoreña que tiene detenido a su hijo en Arizona y necesita 8.000 dólares para pagar la fianza y poder reunirse con él.
Actualmente el portal GoFundMe tiene cerca de 1.600 peticiones relacionadas con la palabra “deportation” (deportación en inglés).
El número aumenta a casi 5.000 cuentas cuando se hace la búsqueda con la palabra “detention” y a más de 7.000 con el término “immigration”.
California, Nueva York y Texas suman cada uno más de 300 cuentas relacionadas con la inmigración.
Las solicitudes de ayuda provienen de toda la nación, incluso de estados tan pequeños como New Hampshire, donde la familia del hondureño Eleazar López Ayala se vio obligada a pedir dinero al público después que fue detenido por las autoridades federales.
La familia de López Ayala logró superar la meta de 5.000 dólares que necesitaba en tres meses.
Pero no todos corren con la misma suerte, tras diez días de abrir una cuenta para recolectar fondos, la familia de Rony Hernández en Florida no ha recibido un solo dólar.
“Por eso debemos tratar de difundir las peticiones y echarle una mano a la gente que realmente tiene una necesidad, no todos saben cómo buscar ayuda” indicó Wood.
El activista instó a la comunidad a unirse a las campañas de recolección de fondos y verificar las peticiones para no caer en posibles estafas. “Sólo una comunidad unida podrá soportar los ataques a la comunidad inmigrante”, sentenció.
P.