Su nombre es Holland. Ella es una pequeña perrita que vivía muerta de hambre y de frío en las calles de Chicago, en Estados Unidos.
Su vida, y su aspecto, cambió radicalmente luego de que Trio Animal Foundation la rescatara.
A Holland la afeitaron y le dieron varios cariñitos y quedó irreconocible. “El espesor del pelo en sus patas era de más de siete centímetros de grueso. El pelo era como un caparazón que le cubría casi la mitad de su lomo”, dijo en una publicación en Facebook la fundación.
Holland fue adoptada por una joven pareja y su cara de felicidad fue la evidencia de cómo la vida le cambió.
DC/RTA