¿Loco o Patriota? Por José Ernesto Pons B. (@joseponsb)
Es así que la percepción social tuvo con este conciudadano que irrumpió al igual que nuestros héroes de franela en la realidad social y política en Venezuela. Del cual, la gente sentía de este personaje admiración, respeto y a su vez desconfianza. De estos elementos se fortalecieron cuando murió acribillado en un enfrentamiento con los Cuerpos de Seguridad del gobierno, con la participación de “colectivos” de la cual, será el tiempo el encargado de verificar y ofrecer los hechos tal como ocurrieron.
Deja un muy controvertido debate, entre lo bueno y lo malo, lo moral e inmoral. Lo que sí se puede percibir es el profundo luto compartido por la gente en las calles, en las redes y en el espíritu de lucha que permanecen en muchos de los ciudadanos que se resisten a sumarse al CLAP, a la chamba juvenil, carnet de la patria entre otros cuentos de la imaginación revolucionaria pregonadas en el noticiero de la patria.
La irreverencia, la contundencia y la sintonía de Oscar Pérez con sectores sociales en el país, fue su mayor capital. La creatividad y la búsqueda de presionar, realmente molestaron al gobierno venezolano, el cual con el tiempo se les convirtió en una piedrita dentro del zapato. He allí que su mayor victoria fue aportarle a nuestra sociedad la esperanza y el valor que aparentemente permanece oculta. Tras el hambre, las miserias y las constantes amenazas del régimen.
Pérez, tuvo una mezcla de sentimientos encontrados que mantuvieron su moral en alto, ya que, todas sus estrategias y eventos que protagonizo no lograron atentar con la vida de sus agresores. Respetando la condición humana y demostrando su espíritu de grandeza en ese mundo que construyo en la controversia social, fue así su proceder. He allí, que el modelo de conducta, denoto respeto a la vida humana y a sus compañeros de lucha que creyeron en sus convicciones.
Este fenómeno social, aparentemente y de eso estamos seguro por sus característica, traerá “cola” en el modelamiento social; como así, los grupos clandestinos y de resistencia asumirán esta experiencia para enriquecer sus muy personales caminos y formas. Dándole un giro a las futuras actuaciones de las protestas y estrategias de sectores que existen y que posiblemente darán la pelea conjuntamente con apoyo institucional en el extranjero por la libertad y el cambio en Venezuela.
Muere un héroe para algunos, para otros un terrorista. Lo real, es que se convirtió hoy en una referencia del deber ser para muchos, y esto, es lo más peligroso para el régimen venezolano que tendrá que cargar otra muerte a sus haberes en materia de los DDHH. La sociedad, todavía lenta en lograr asimilar tales eventos, entenderán en el transcurso de los meses una gran verdad, esta no es más que los cambios que requiera la vida política, económica, social y ecológica del país, en primeramente responsabilidad de cada uno de nosotros.
“Jesús les dijo: “En todas partes se honra a un profeta, menos en su propia tierra y en su propia casa”
DC / Dr. José Ernesto Pons B / @joseponsb