El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, alertó al Consejo de Seguridad del organismo sobre la inseguridad que se presenta en algunas zonas de Colombia afectadas por el conflicto armado y dejó en evidencia la preocupación por el incremento en el número de líderes sociales asesinados.
En el informe, publicado este sábado en la página de internet de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, Guterres habla de la «preocupación sobre la inseguridad en zonas rurales afectadas por el conflicto, incluyendo territorios de mayor incidencia de las FARC-EP previo a su dejación de armas».
En este primer Informe Trimestral, que cubre el periodo comprendido entre el 26 de septiembre y el 26 de diciembre 2017, se indica que hay un «creciente número de asesinatos de líderes sociales, defensores de derechos humanos, activistas de restitución de tierras y promotores de programas de sustitución de cultivos, así como los homicidios de exintegrantes de las FARC».
Además, el texto resalta el incidente del 5 de octubre del año pasado en el municipio de Tumaco, ubicado en el suroeste del país y el de mayor cantidad de cultivos de coca, en el cual siete personas fueron asesinadas y 20 resultaron heridas durante una operación de erradicación de dichas plantaciones. Ese, indica el informe, es «uno de los casos más serios desde la firma del acuerdo de paz» con la guerrilla en noviembre de 2016.
Entre los avances positivos de los últimos tres meses se destaca la transición de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) a la vida política legal.
G.