Al menos 415 pacientes renales de Maracaibo pasan la semana sin diálisis

La falta de insumos, el deterioro de las máquinas de diálisis, el alto costo del transporte para el traslado de los pacientes nefróticos, aunado a la crisis actual que atraviesa el país, ocasionó que los enfermos renales de la Unidad Centro del Sol en Sabaneta, protestaran por la escasez de suministros necesarios para realizar las hemoterapias. Con esto suman 415 pacientes nefróticos en Maracaibo, que no recibieron diálisis durante toda la semana.

“Desde el jueves no hay material para realizar las diálisis”, según afirmó Lisbeth Paz (55), una de las paciente renales. Comentó que 180 pacientes dependen de esta unidad médica para cubrir sus tratamientos y que a pesar de tener un total de 31 máquinas operativas, por la falta del material para la hemodiálisis los enfermos quedan sin alternativas. “El responsable de suministrar los materiales es el Seguro Social y todos los días dicen lo mismo, que ya están por llegar y no llegan, como si nosotros pudiéramos esperar”.

Los afectados cerraron la calle 100 donde está el módulo asistencial para exigir al Gobierno regional sean atendidas sus necesidades. En el sitio se presentó una unidad de la Guardia Nacional para intentar mediar con los afectados y restablecer el libre tránsito. Los manifestantes insistieron que no cesará la protesta hasta obtener alguna respuesta del ayuntamiento o de la Gobernación del estado Zulia.

Este centro médico realiza tres turnos de terapias de 30 pacientes cada uno, para un total de 90 pacientes dializados por día, y el material que se necesita no se consigue en cualquier parte, en toda Venezuela hay una sola empresa encargada de la distribución de los materiales para las quimioterapias, según reseñó la paciente.

Nadie se salva 

Las instituciones públicas capacitadas para atender estos casos son las más perjudicadas y carecen desde comida para los internos hasta del hierro y las vitaminas, que son de suma importancia para los atendidos y falta de personal, debido a que en la última semana renunciaron ocho enfermeras, confirmó la afectada. Comentó que en los centros de atención privada las diálisis más económicas rondan los cuatro millones y medio de bolívares, son tres por semana y en su caso no cuenta con los recursos económicos para cubrir esas cifras.

Carmen Reyes (65), paciente del Centro Médico de Occidente (CDO), aseguró que en esta unidad asistencial no se realizan diálisis desde el miércoles. Recordó que desde el lunes los insumos estaban por acabarse y quedarían sin tratamiento 235 personas que dependen del CDO.

“De 35 máquinas que tiene el CDO solo 20 están funcionando y la empresa encargada de reparar las máquinas nada más cuenta con un solo técnico para toda Venezuela, porque todos se fueron del país y solo en Caracas hay 300 máquinas dañadas”, expresó la sexagenaria.

Crisis renal 

Pacientes renales protestan a las afueras del Centro Nefrológico CA (Ceneca), ubicado en la avenida Alianza de Acarigua, estado Portuguesa, para exigir sus tratamientos que no se colocan desde hace dos semanas.

“Ayuda, necesitamos tratamiento”,  gritaban las personas. Los manifestantes cerraron el paso en la zona desde las 8.30 de la mañana,  con pancartas, informó una fuente a El Nacional.

Exigieron al gobernador de la entidad, Rafael Calles, que los ayude para que puedan llegar sus medicamentos.

Arribo 

Los dispositivos dializadores de hemodiálisis arribaron al país ayer, según informó Luis López, ministro para la Salud, a través de su cuenta Twitter @LuisLopezPSUV.

«Gracias al presidente de la República, Nicolás Maduro, llegaron a Venezuela más dializadores para garantizar a pacientes sus procedimientos dialíticos», reseñó el ministro.

El jefe de Estado aprobó el pasado martes los recursos para la adquisición de insumos para las máquinas de diálisis del banco de sangre del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales. Destinó un total de 12 millones 385 mil euros, con el objetivo de comprar los componentes necesarios para el funcionamiento de estas salas de diálisis en el país.

La Verdad