Dirigentes de la oposición venezolana insistieron en que el Gobierno «no quiere elecciones limpias» ni «restituir la democracia», al rechazar nuevamente el anuncio de la fecha de los comicios presidenciales, en los que Nicolás Maduro buscará la reelección, y que se realizarán el 22 de abril.
El dirigente opositor y negociador en el diálogo con el Gobierno Luis Florido, reiteró hoy que el Gobierno «no quiere elecciones limpias» y consideró que las conversaciones en Santo Domingo sirvieron «para quitarle la careta» al Ejecutivo.
El también dirigente opositor Andrés Velásquez afirmó que la votación de abril, en la que gran parte de la oposición aún no decide si participará, es una «emboscada electoral».
«El pueblo en unidad nacional, exige condiciones para una contienda justa», manifestó Velásquez, quien agregó que las «elecciones sin garantías ni respeto por ninguna norma, convierte el acto electoral en una farsa».
La oposición venezolana considera que no están dadas las garantías para las elecciones presidenciales, pese a que intentaron buscarlas en el diálogo político que sostuvieron con el Gobierno de Maduro durante los últimos dos meses.
En esas reuniones, el antichavismo buscaba, entre otros asuntos, la habilitación de sus principales líderes políticos y una fecha «prudente» para las presidenciales, luego de que la oficialista Asamblea Constituyente decretara que debían celebrarse antes de mayo.
«En el proceso de negociación siempre dijimos que las elecciones deberían ser convocadas con seis meses de antelación, el Gobierno proponía cuatro meses, al final convocaron a elecciones sin respetar los tiempos», sostuvo Florido.
El 22 de abril es la fecha establecida en el documento que el oficialismo ha instado a la oposición a firmar; sin embargo, Florido reafirmó hoy que esa propuesta era un «5-0», que solo beneficiaba al chavismo.
El también presidente de la Comisión de Política Exterior del Parlamento aseguró que la propuesta era «confusa» y «no tenía los detalles en materia electoral» que la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) exigía y que agregó en un documento final, que fue rechazado por Maduro.
Uno de los negociadores del oficialismo en el diálogo, Roy Chaderton, indicó hoy que la oposición se burló del proceso de negociación al negarse a firmar un acuerdo con el Gobierno.
Pese a la posición de la MUD sobre que no están dadas las garantías, hay opositores que están presionando para que el antichavismo participe en las elecciones.
El precandidato presidencial opositor Henri Falcón, líder de la formación Avanzada Progresista (AP), afirmó hoy que «el abuso y ventajismo del Gobierno están a la orden del día, pero la no participación, es un arma de doble filo, que en el pasado no ha logrado ni deslegitimar, ni sacar al Gobierno».
El también aspirante presidencial Claudio Fermín, quien ofrecerá una rueda de prensa este sábado para presentar sus propuestas, señaló que los venezolanos no se pueden «cruzar de brazos» y que se deben «pedir mejores condiciones», pero también «salir a votar masivamente para derrotar la trampa».
Tanto Fermín como Falcón, que no gozan de gran popularidad, han coincidido en la necesidad de que la oposición debe estar unida y en que en las elecciones debe haber una participación «masiva».
En los comicios presidenciales de abril no podrán participar varios líderes de la oposición, como el dos veces candidato a la Presidencia Henrique Capriles Radonski, quien está inhabilitado, y el dirigente preso Leopoldo López.
Los partidos de ellos tampoco podrán acudir a esa votación, debido a que a la formación de Capriles, Primero Justicia (PJ), el consejo electoral le impidió validarse; mientras que la de López (Voluntad Popular) decidió no participar en el proceso de validación.
La Verdad