Las intensas lluvias en Bolivia han dejado un saldo de ocho personas muertas, decenas de miles de perjudicados y cuantioso daños materiales, de acuerdo con el último reportes del Comité de Operaciones de Emergencia Nacional.
Alrededor de 15.517 familias han sido afectadas por el desastre natural y 429 quedaron damnificadas, mientras que 315 viviendas sufrieron daños.
Entretanto, las autoridades de la nación suramericana se mantiene alerta ante la riadas, inundaciones y mazamorras, informó este domingo el viceministro de Defensa Civil, Carlos Bru.
Bru precisó que la mayoría de los fallecimientos ocurrieron en la mazamorra registrada en el municipio de Tiquipaya, en Cochabamba.
«Evacuar ante emergencias es difícil, muchos prefieren quedarse a cuidar sus bienes materiales, sin embargo, hemos actuado de forma oportuna para que las personas entiendan y salgan de las zonas de riesgo», explicó el funcionario boliviano.
Destacó que las autoridades de ese país «tienen los recursos para prestar el auxilio y ayuda de manera eficiente» a los afectados y añadió que para esa labor cuentan «con la colaboración de las Fuerzas Armadas y de la población civil».
DC / Telesur