Nosotros: “El gran poder de los ignorantes” Por Johnny Galue (@COOTUR)
En un presente que amenaza con hacerse perpetuo
Donde la voluntad mayoritaria, se convierte en instancia suprema, recluyendo a una sociedad, en el laberinto de sus propios errores. Con el sufragio universal, se creen soberanos, mientras en realidad actúan al dictado de la manipulación más sofisticada de la historia. Sujetas por el control psicológico y el halago de las pasiones, hasta la obnubilación del criterio. Hasta convertir el sufragio en un simple expediente de ratificación de programas ajenos a su conocimiento.
Ignorantes responsables, en la medida en que conocen la perversidad de las aberraciones que “legitiman” con sus votos, pero absolutamente desprevenidos, porque se les ocultan las consecuencias finales, mortíferas para ellos mismos.
Pretenden legitimar, los enemigos del género venezolano. Que además, “amordaza a los venezolanos” porque esgrime contra cualquier reacción el argumento “inapelable” de la democracia.
Contemplamos, como espectadores impotentes, la hegemonía de la mentira en todos los terrenos. Mentira convertida en dieta obligatoria de los venezolanos. Todo ello, naturalmente, maquillado por un “proceso democrático” que llama a una elecciones, de las cuales ya sabemos sus resultados. Una muestra más de la receta, que refleja el desprecio del derecho internacional y la arrogancia de la secta que impulsa la unificación esotérica de los venezolanos.
Es sólo cuestión de tiempo, que este engranaje se vuelva contra la Iglesia católica, con una agresividad inimaginable, si no consiguen antes someterla. Por algo Benedicto XVI denuncio públicamente (en S. Juan de Letrán, el 13 de junio) la cultura de la mentira y la calumnia.
Otro ejemplo no menos elocuente es la utilización de los espectáculos deportivos, musicales como distracción para poblaciones sometidas al expolio sistemático, poblaciones conducidas a la satisfacción virtual de sus inclinaciones, en régimen de esclavitud disimulada. No parecen que sean necesarias mayores explicaciones. Pero quien dude del trasfondo satánico del proceso, debería examinar con mayor atención el tratamiento ético y moral de lo que aquí ocurre.
Tampoco olvidemos otra ignorancia paradigmática, aquella de la física experimental, convertida por la secta dirigente en alquimia teosófica, están a punto de exponer “la partícula que confiere a las demás partículas su masa” aunque, en este caso, los aprendices de brujo colaboran sin saberlo con los planes de cambio.
El riesgo que corre hoy el País, es pavoroso, precisamente por la ignorancia de las calamidades a las que estamos sometidos. Si no se sabe lo que nos pertenece, terminará por perderse.
DC / Dr. Johnny Galue / Abogado, Político / @COOTUR