Al siguiente día de su reclusión en el retén de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui) en el comando de la Zona 5 en El Tigre, fue estrangulado Carlos Eduardo Carrasquero Marín, de 28 años.
El cuerpo sin vida del joven fue localizado por los custodios en el calabozo “A”, a eso de las 6:00 de la mañana de este Viernes Santo, pero se presume que falleció el jueves, a las 9:00 de la noche.
De acuerdo con información extraoficial, a Carrasquero lo habrían asfixiado sus compañeros de celda con un mecate. Esa evidencia no ha sido localizada.
El joven ingresó al reclusorio luego de ser atendido en Hospital de El Tigre con las lesiones que le ocasionaron, el miércoles en la tarde, unos vecinos del barrio San Valentín Sur, quienes lo acusaron de tener cautivo en su casa a un niño con la presunta intención de cometer actos lascivos
Los familiares de Carrasquero consideraron que la detención fue injusta porque no lo creyeron capaz de intentar un hecho de violación contra un niño porque no era malo. Una tía de nombre Zurima contó que Carlos Eduardo era acosado y objeto de burla por un grupo de personas de la comunidad por presentar trastorno bipolar.
Relató que en el año pasado le robaron la casa y, aunque el hombre denunció el caso en la policía, no hubo ninguna investigación. El miércoles se volvió a presentar un incidente con la comunidad con la fatal consecuencia.
Carrasquero Marín se ganaba la vida con la venta de alimentos cerca del mercado municipal y en labores de limpieza en supermercados asiáticos.
Trascendió que la casa donde vivía en San Valentín Sur fue incendiada por sujetos aún sin identificar.
Ese es el quinto detenido que muere en calabozos de cuerpos policiales de El Tigre en lo que va del año.