En medio de la creciente crisis que vive el país la Universidad Rafael Urdaneta, como garante de educación y progreso, se mantiene comprometida con el crecimiento y estabilidad de sus trabajadores
La realidad del país ha exigido a la educación superior reforzar sus funciones de servicio a la sociedad, por tanto la URU lejos de estar aislada en su campus exalta cada día más sus políticas generadoras de cambios y oportunidades.
Durante los últimos meses la casa de estudio no ha escapado a las medidas de austeridad que, aunque siendo habituales, se han acentuado para adaptarse a los tiempos actuales. En ese sentido hay un compromiso de toda la comunidad universitaria de suprimir gastos sin afectar la calidad del proceso formativo.
El Dr. Jesús Esparza Bracho, Rector de la URU, manifestó que ha sido necesario replantear mecanismos de trabajo a fin de aplicar medidas de austeridad, que contribuyan a disminuir gastos sin afectar la eficiencia y eficacia de los procesos académicos: “Ante la crisis es necesario disminuir el consumo de materiales a través del uso racional y de la más alta eficiencia en el desempeño”, apuntó.
Bono extraordinario
Por otra parte, indicó la autoridad que este ahorro paulatino le ha permitido a la casa de estudios contar con la disponibilidad financiera para mejorar y apoyar la situación de los empleados en general, incluyendo profesores, pues se pudo otorgar recientemente un bono extraordinario equivalente a una cesta ticket más casi 30% adicional.
Este bono, si bien indicó el rector representa un paliativo, podría repetirse con cierta regularidad si se le da continuidad al rigor en los gastos internos, encontrando de este modo la combinación óptima entre las políticas de austeridad y las de estímulo económico.
Cabe destacar que este año, la institución le ha otorgado a sus trabajadores un ingreso adicional de 110% duplicando así el concepto salarial, lo que se traduce en un ambiente de sosiego para el empleado, garantizando un mínimo de ausentismo laboral, pero además haciendo la crisis menos penosa y buscando siempre alternativas y espacios para incrementar la capacidad y productividad.
Austeridad y creatividad
El rector fue enfático en la responsabilidad que debe tener el venezolano: “Venezuela hoy tiene que aprender a ser austera y poner a la imaginación e inteligencia al servicio de nuestras actividades para hacer mejores cosas, muchas veces las dificultades y las deficiencias económicas nos permiten ser más creativos”.
Aludió además a hechos históricos que evidencian que los países en medio de las crisis, pueden elevarse gracias al talento humano y a la capacidad para asumir nuevos desafíos, en un entorno cada vez más cambiante y complicado.
Como parte del esfuerzo que se debe hacer ante la crisis, la Universidad Rafael Urdaneta, continúa con su aporte para construir un nuevo país a través de iniciativas como la Filarmónica URU y la “Expo Empleo y Pasantía 2018”, haciendo a los estudiantes cada vez más cercanos al mercado laboral.
DC / NP