Por primera vez, la NASA enviará esperma humano suelto en el espacio exterior.
La misión Micro-11, que hizo su camino al espacio a bordo de una cápsula de reabastecimiento de dragones SpaceX Falcon 9, equivale a un grupo de contenedores de esperma humano y toro congelado, reseña 20minutos.es.
A bordo de la Estación Espacial Internacional (EEI), los científicos descongelarán los espermatozoides, y luego los estudiarán para ver cómo la falta de gravedad afecta su capacidad para moverse y prepararse para fusionarse con un óvulo.
“Experimentos previos con erizos de mar y espermatozoides sugieren que la activación del movimiento ocurre más rápidamente en microgravedad. Mientras que los pasos previos a la fusión ocurren más lentamente o ni siquiera ocurren. Las demoras o los problemas en esta etapa podrían evitar la fertilización de pasar en el espacio”, explicaron funcionarios de la NASA.
La NASA está enviando esperma de toro junto con esperma humano porque las células de toro son más consistentes en actividad y apariencia que los espermatozoides humanos. Al estudiarlo junto con el esperma humano, los astronautas podrán descubrir si algún comportamiento extraño que se pueda percibir es el resultado de algo inusual en una muestra de esperma particular o los efectos de la microgravedad.