La ahora ex operadora de 911, Crenshanda Williams, en Houston, Texas, terminó tras las rejas por cortar los llamados de emergencia que recibía.
La mujer de 44 años, fue sentenciada a 10 días de prisión y 18 meses de libertad condicional por interferir en las llamadas telefónicas de emergencia.
No lo hizo una vez ni dos. Según la fiscalía del condado de Harris, Williams sistemáticamente cortaba las denuncias de emergencias.
Las llamadas que cortó incluían reportes de robos, vehículos que iban a toda velocidad y asesinatos, según muestran los registros.
Williams trabajó como operadora del 911 durante 18 meses, hasta 2016.
La oficina del fiscal tiene un sistema de grabaciones de llamados que registra si el operador o el denunciante es el que corta la comunicación. Se pudo comprobar que miles de llamados de menos de 20 segundos fueron cortados por Williams.
La mujer cortaba la comunicación porque en esos momentos no quería hablar con nadie, según ella misma le dijo a los investigadores.
«Los ciudadanos confían en los operadores del 911 para que se les envíe ayuda en momentos de necesidad. Cuando un empleado público traiciona la confianza de la comunidad y viola la ley, tenemos la responsabilidad de hacerlos penalmente responsables», dijo en un comunicado la Fiscalía.
DC | Clarín