Un sorprendente acuerdo judicial ha librado a un condenado por menudear con drogas en Vigo, España, de su ingreso en prisión. A cambio de esquivar la cárcel, el procesado deberá dejarse crecer el pelo al menos 3 centímetros para que pueda corroborarse que, tal y como insistió durante la vista oral por el delito, ya no consume ningún tipo de sustancia.
Durante el juicio en la sección quinta de la Audiencia de Pontevedra, el protagonista de esta sentencia insistió en que llevaba mucho tiempo luchando por salir del mundo de las drogas y reiteró que su entrada en prisión podría «poner en peligro» este recuperación.
La tesis, según recoge La Voz de Galicia, fue apoyada por la Fiscalía, que no se opuso a que el condenado siguiese en libertad, siempre a cambio del inesperado compromiso. Así, el vigués tendrá que demostrar de manera periódica que está limpio, por lo que deberá entregar a los forenses una muestra para su análisis. Este test será capaz de detectar la ingesta de cualquier droga y el momento temporal, lo que podría poner en riesgo la libertad del condenado.
«No se la juegue»
«Usted no tiene que convencerme a mí ni engañarse a usted mismo, es mejor que no se la juegue, porque si vuelve a consumir irá a la cárcel», le indicó una de las integrantes del tribunal para dejar clara su situación. A cambio del trato, el acusado aceptó tres años de prisión y el pago de una multa de 2.800 euros.
DC | ABC