Los habitantes de una isla de Vanuatu, en el sur del Pacífico, se preparan para una segunda evacuación en siete meses debido a un volcán que vuelve a escupir cenizas.
Las autoridades del archipiélago declararon el viernes el estado de emergencia en la isla de Ambae, en el norte, de la que 11.000 habitantes fueron ya evacuados en septiembre debido a la amenaza del volcán Manaro Voui.
Muchos de ellos acababan de regresar, pero el Observatorio de Prevención de Riesgos Geológicos de Vanuatu anunció que el Manaro Voui registraba actualmente una erupción de nivel 3, en una escala de cinco.
El director general del ministerio encargado de la prevención de Catástrofes Nacionales, Jesse Benjamin, señaló que la nueva evacuación se llevaría a cabo de manera más ordenada que en septiembre, cuando se movilizó una flotilla de pequeñas embarcaciones para ir a buscar a los habitantes de Ambae.
«La evacuación del año pasado se hizo de manera apresurada ante el temor de una erupción de gran envergadura», dijo a la Daily Post.
«Hay un descontento sobre la manera como ocurrió. Esta vez vamos a evacuar primero a las poblaciones más afectadas».
El archipiélago de 80 islas, que tiene 270.000 habitantes, fue en parte destruido en 2015 por un poderoso ciclón que dejó 11 muertos.
Condominio franco-británico hasta su independencia en 1980, Vanuatu es uno de los países más pobres del planeta.
Se sitúa en el llamado «cinturón de fuego» del Pacífico, donde la colisión de placas tectónicas causa frecuentes terremotos y una importante actividad volcánica.
DC / AFP