El gobierno de Chile confirmó este miércoles que no designará un embajador en Venezuela como señal de protesta por las cuestionadas elecciones que se celebraron el pasado domingo en ese país, en las que el presidente Nicolás Maduro fue reelegido.
“Nosotros no vamos a enviar un embajador a Venezuela”, afirmó el Canciller chileno, Roberto Ampuero, en una rueda de prensa en Santiago junto al secretario de Estado de Asuntos Exteriores del Reino Unido, Boris Johnson, que está de visita en el país.
Ampuero subrayó que la decisión está “en consonancia” con los 14 países americanos que conforman el Grupo de Lima, que después de los comicios decidió “degradar el nivel de las relaciones diplomáticas” con Venezuela.
“Esto no significa que cerremos la embajada, sino que los países que firman el acuerdo del Grupo de Lima han establecido que el nivel de embajadores no es el adecuado para negociar, conversar o instalar la comunicación con Venezuela”, explicó el jefe de la diplomacia chilena.
El Grupo de Lima, del que Chile forma parte, emitió un comunicado el lunes pasado en el que desconoció los resultados electorales de Venezuela por no cumplir con “los estándares internacionales” y decidió “reducir el nivel de sus relaciones diplomáticas” con ese país.
El Canciller explicó que durante la reunión con su homólogo británico le trasladó la preocupación de Chile por la “grave situación” de Venezuela y las medidas de “tipo humanitario” que el gobierno está apoyando.
“Nosotros invitamos al Reino Unido a examinar las posibilidades de que incremente y haga valer sus buenos oficios en la región para que el tema de Venezuela sea resuelto dentro del marco político, diplomático, por la vía pacífica y negociada”, añadió.
El secretario de Estado de Asuntos Exteriores británico aseguró que las elecciones venezolanas del pasado domingo fueron “fraudulentas” y un “montaje”, y dijo que su país comparte los planteamientos chilenos.
“Hay una cosa que me ha conmovido mucho, que es la profunda emoción y cómo impacta a todos los países de la región ese sentimiento de ver que hay una crisis en Venezuela y que la comunidad internacional tiene que unirse y ejercer presión para que las cosas cambien en ese país”, manifestó Johnson.
DC | EFE